Apocalipsis 1:13-15
"...y en medio de los siete candelabros uno semejante al Hijo del Hombre, vestido con una túnica que le llegaba hasta los pies, y ceñido por los pechos con un cinturón de oro: su cabeza y sus cabellos eran blancos como la lana, tan blancos como la nieve; sus ojos eran como una llama de fuego, y sus pies semejantes al bronce fino, como si ardieran en un horno; y su voz como el sonido de muchas aguas..."